Cada vez son más los fabricantes de automóviles que sustituyen el acero empleado en la fabricación de sus vehículos por aluminio y esto se debe a la gran resistencia, ductilidad, maleabilidad y durabilidad que tiene este material. En la década de los 90, marcas como Jaguar, Land Rover, Audi o BMW ya apostaron por incluir el aluminio entre las materias primas utilizadas para producir sus modelos, aunque Ford ha sido la primera compañía en utilizar aluminio reciclado en la fabricación de sus camionetas Ford F-150.
El uso de aluminio reciclado en la fabricación de vehículos tiene un doble beneficio. Por un lado, ayuda a reducir el peso de los automóviles y con ello a disminuir el consumo de combustible. Además, también se reduce el empleo de materias primas vírgenes en el proceso de fabricación ya que éstas se sustituyen por el aluminio reciclado, siendo de gran ayuda para el medio ambiente.
En la actualidad, el 75% del aluminio fabricado hace 100 años todavía se encuentra en uso y esto permite que, muchos productos de diferente naturaleza sigan fabricándose sin ser necesaria la extracción minera del material con el que se obtiene la aleación (la bauxita). Este hecho ha propiciado la reducción de los costes energéticos que se derivan de la extracción de minerales ya que el aluminio tiene una extensa vida útil que le permite ser reutilizado tantas veces como se quiera sin perder ninguna de sus propiedades.
Sencillo proceso de reciclaje y aumento de la demanda de aluminio recuperado
A día de hoy, el reciclaje de aluminio es una actividad totalmente normalizada y rentable, que proporciona diversos beneficios medioambientales, sociales y económicos. Debido a las extraordinarias propiedades que mantiene el aluminio reciclado, se calcula que la demanda se verá triplicada en menos de 10 años sobre todo por los fabricantes de automóviles y otros vehículos destinados al transporte de personas o de mercancías.
Por ello, los proveedores de aluminio junto con las compañías del sector automovilístico, están desarrollando nuevas aleaciones de aluminio e investigando el modo de aumentar su resistencia, consiguiendo la maleabilidad necesaria en este tipo de nuevas aplicaciones. En gran parte de estas nuevas aleaciones, se utiliza el aluminio reciclado debido a que es el material con uno de los mayores índices de recuperación en el mercado, pues dado el impulso que se da desde la Unión Europea para incrementar la recogida y el reciclaje de envases de aluminio reciclado, en España ya recuperamos hasta un 66% del aluminio que se comercializa a través de los envases y concretamente en 2015, llegamos a reciclar casi 28.000 toneladas de envases de aluminio, según datos de ARPAL (Asociación para el Reciclado de Aluminio) publicados en este artículo de El Economista.
Puesto que el aluminio reciclado no pierde ninguna propiedad ni envejece, cada vez aumenta más su demanda frente al aluminio primario y no solo en la industria automovilística sino en cualquier tipo de proceso productivo que emplee dicho material. No obstante, todavía estamos lejos de cubrir el 100% de las necesidades de aluminio con material que proviene del reciclado, pues actualmente el 70% del utilizado proviene de la extracción de la bauxita.
Etiquetas: aluminio, chatarra, industria automovilística, materiales, metales, residuos
Publicado por José Jareño S.A. el Viernes, 24 de febrero del 2017
Hola, me parece que el aluminio se distingue entre los demás por su aprovechamiento casi total. Ustedes creen que pronto veremos el aluminio como opción para más aplicaciones de las que hoy existen?
Felicidades por su artículo